Hoy ha sido la apertura oficial del Capítulo General 28. Seguramente, quien vea los cientos de fotos que seguro andarán ya por las redes sociales, pensará que ha sido una cosa muy formal y muy seria. La verdad es que, como cualquier acto semejante, lo ha sido; pero, como ocurre muchas veces, lo esencial es invisible a la vista (y a las fotos) ysolo se ve con los ojos del corazón‘. Creo que algo así decía Antoine de Saint-Exupéry en El Principito. Pues algo de esto es lo que ha pasado hoy.

Apertura oficial del 28º Capítulo General

Apertura oficial del 28º Capítulo General

Publicada por Agenzia Info Salesiana – Ans en Viernes, 21 de febrero de 2020

Más allá de la cantidad de sacerdotes y coadjutores que llenábamos la basílica de María Auxiliadora; más allá de la cantidad de representantes de los grupos de la Familia Salesiana, que hoy eran muchísimos y de grupos desconocidos en España (al menos para mí); más allá incluso de los obispos y cardenales que han presidido la eucaristía y el acto de apertura; más allá de los saludos y discursos oficiales… con los ojos del corazón hoy hemos visto (y vivido) un día de familia emocionante y profundamente entrañable. Gestos, miradas, emociones, palabras, encuentros… en resumen, personas.

Como salesiano he podido sentir cerca el ánimo y el apoyo de mucha gente que está lejos. Amigos, hermanos, cooperadores, jóvenes, antiguos alumnos, ADMA, Hijas de María Auxiliadora, todos con rostros y nombres, aunque no estuvieran presentes físicamente. junto a los salesianos que hemos recibido el encargo (y la responsabilidad) de participar en el CG28.

Al salir del aula magna al finalizar el acto de apertura recordaba el Campobosco Nacional del año 94 en el que participé cuando era tirocinante en Burriana. Hoy podría haber gritado y repetido lo que en estos mismos patios decíamos: “Se nota, se siente, Don Bosco está presente”.